La vida es realmente maravillosa. Simplemente me encanta estar aquí, en esta simpleza que me lleva por caminos que en verdad a veces desconozco, que me maravillan, asustan, me hacen reír, llorar y volver a nacer.
No cabe duda que una vida, como siempre lo he dicho, de color de rosa, sería la peor aburrición que cualquier ser humano, o criatura viviente, pudiese tener.
El día de hoy paso algo bien sorprendente, aunque de hecho ya habia experimentado algo de ésto hace unos meses. Y bueno, pues el día de hoy platique con una persona que en su momento significo muchísimo en mi vida, que adore y ame con todas las fuerzas de mi corazón, pero que en la vida de cada uno, en ese espacio en el que nuestras vidas se cruzaron y permanecieron juntas no fue el más propicio ni mucho menos. A pesar de que recuerdo con alegría muchas experiencias compartidas, también no olvido la huella que dejo el dolor que me causo su perdida, y las constantes discusiones que teníamos. Sin embargo, a pesar de todo, de cualquier situación, no cambiaría lo vivido con él por nada del mundo. Y a pesar de que en una época conjure a todos los peores demonios de mi interior contra él, aparentemente para -yo creo- sentirme mejor y olvidar por un rato el harto dolor, hoy puedo tener una platica de lo más sana con él y permitirme el lujo de bromear acerca del pasado y reírme a carcajadas de miles de tonteras que puedo compartir con él, y que , aunque suene bien raro, se que no hay, hasta éste día, alguien que pueda entender lo que mi cabecita piensa mejor que él, claro, y yo.
Así las cosas. La verdad no trato de reinvidicarle o hacerme menos, o decir que es lo mejor que me paso en la vida, pero solamente puedo expresar que gracias a mi experiencia con él hoy puedo valorar muchisímos detalles, y discernir entre lo que deseo y no.
Me siento muy bien.
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